Buscar este blog

viernes, 10 de julio de 2015

FELIZ CUMPLEAÑOS CUYANITA



En el mes de julio cumplen tres miembros de la familia años y hoy la dueña del santo, como se dice en nuestra tierra, es Anita Esther, más conocida como "Cuyanita"; no crean que es por la cara de cuy frito que tiene, sino porque hay una tonada y una cantante cuyanita  (llama así artísticamente) de donde salió el sobrenombre.
Nuestra Anita es la quinta de las seis hermanitas Cortez Honorio (después de nuestra querida hermanita Irmita, que ya se nos fué, y, la única que quedó en nuestra querida tierra).
Doña Cuyanita es la más chocha con sus nietos. Antes era la más viajera, al extremo que le pusimos de chapa "la corre caminos", ahora ya no se mueve de su Santo Dominguito, allá en Trujillo, ni para sus cumpleaños.
Todos sus hermanos, en este día de sus cumpleaños, desde donde nos encontramos, le deseamos que pase un lindo día y que se maten los cuyes y que se baile el carnaval de la Santa Tierra y los clarines que tanto caracteriza a nuestra tierra.

Salud mi Any.

Todos estamos invitados a la cuyada en Santo Dominguito.

Un abrazo y un bezote para nuestra hermanita (en su día)


jueves, 9 de julio de 2015

FELIZ CUMPLEAÑOS ALE...JANDITO, COMO EN AQUELLOS TIEMPOS QUE "RECORDAR ES VOLVER A VIVIR"


Un día como hoy, llegó la alegría para esta gran familia cajamarquina (sin tradición, aún). Don Celso Arqímedes Cortez Ruiz, quien había cumplido 25 años un día antes, y, Doña María Honorio Rodriguez, se llenaron de orgullo por la llegada de su primogénito, a quien y desde entonces,  le dieron su lugar, de segundo padre; pero, también le dieron la  plena responsabilidad -como prueba de valor- de ser siempre y en todo momento el ejemplo para sus hermanos y lo formaron para que así sea y eso es justamente lo que supo responder con firmeza nuestro Jando (como así lo llamábamos cariñosamente, aunque su hermanita Olgui le decía "Papalelo" y las demás hermanitas le siguieron). Muy temprano se inquietó por seguir Ingeniería Agrónoma; no sabemos si él sabía que significaba eso, pero, fueron más poderosos los fierros y su pasatiempo de aquel entonces, y los carros que hasta ahora no deja de manejar, lo que le impulsó a venir a Lima para estudiar  en la UNI ( la universidad más difícil). 
Aun recordamos que Don Quimecito, no estaba muy de acuerdo; pero, como le gustaban mucho las matemáticas y, fue suficiente la aprobación de nuestro tío Marcial (que era Ingeniero de la UNMSM) quien después de someterlo a un examen riguroso -porque la UNI era todo un reto-,  que su Quimecito no le quedó otra cosa que sacrificarse para que nuestro hermano mayor venga a Lima a demostrar si realmente era capaz sabiendo que solo el esfuerzo nos hace grandes. Al parecer, esta ejemplar decisión y acción, impulsó a los demás de la familia para que existan muchos seguidores que quieran demostrar que ellos también pueden: hermanos, hijos, sobrinos y sobrinas, nietos y biznietos de Don Celso y de Doña Mricuchita, y, como si esto fuera poco, hasta cuñados ingenieros -esposos de las hermanas-. Pero, ¡Que bruto!, o ¡Que padrísimo!, como dirían los mexicanos, y,....    ¿para qué tantos ingenieros, ah?; más de una docena... ¿no les parece que ya se pasaron? Felizmente, tenemos tres médicos, para compensar la racha. 
Sin embargo, cuenta la historia que a los primeros hijos,  Don Quimecito - que así lo llamábamos cariñosamente- les proponía seguir la carrera de abogados, al menos eso fue lo que le inculcaba al primero y al tercero de ellos; ¡pero nada!, tercos como unas mulas, mejor dicho, como buenos norteños, seguían estudiando para ingenieros y seguirá la mala racha, contagiados por ese virus de la ingeniería, que se ha metido en la familia, a pesar de que hay otra gran vocación en los genes de la familia, el arte, que para decir verdad, sí  realmente le pisa los talones a los ingenieritos. Tenemos, muchos artistas en la familia profesionales y aficionados, siendo el primer artista plástico, el último hermano (Carlos Hernán) y luego por lo menos un descendiente en cada hijo o hija, nieto o nieta de Doña Marujita y de Don Celso. Los padres -troncos de esta familia- eran un ejemplo de esposos: Doña Maricuchita, contribuía en gran forma a la formación de todos los miembros familiares, inculcando las buenas costumbres, era su compañerita de Don Quime -por chiquita- (que cuando caminaban junto con su flaco, tenía esta que dar dos pasos  adelante y uno atrás –como decía Olgui, la segunda-, para no dejarla sola y llevar el ritmo. ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!, ¡Ja!) 
"Paso a paso, se llega lejos", es la frace favorita de nuestra Maruy que ella siempre repetía y es lo que precisamente en ella se viene cumpliendo; no olvidemos que ya va por los 97 años, que los cumplirá este 4 de octubre, y siguirá acompañándonos  en este mar de lágrimas, que como buenos cajamarquinos será motivo para degustar los cuyes y vino que tanto le gusta. Estamos seguros que ella hará un brindis, jhoy, allá en Trujillo, con algún vino tinto o blanco, pero vino,  que tanto le agrada y desde allá le dirá -¡¡¡¡¡salud hijito Alejo!!!!!, que Dios te de salud y muchos años como a mí!!!!!!!-  
Nosotros, los demás familiares, también desde donde estemos, bridaremos igualmente porque nuestro Jando, en su día, disfrute con los suyos ahora que los tiene cerca y que brinden porque siga siendo el ejemplo, como lo fue nuestro Quimecito, que Dios lo tenga en su santaa gloria (un verdadero padre ejemplar), que supo hacer feliz a su Marujita tan ¡chiquitita, pero picosa!

¡ah!..... y no olvidemos que mañana sigue la fiesta con Doña Cuyanita por Santo Dominguito.

ENTRADAS (Spots) del BLOG familiar